5/10/2014

MINUTO DOMINICAL
“La Puerta abierta”

11 de Mayo de 2014. Domingo 4° de  Pascua-  Ciclo A
Domingo del Buen Pastor- Evangelio de San Juan  10, 1-10
                     
Yo soy la puerta. El Buen Pastor y Maestro Jesús se compara con una puerta abierta. Si uno entra por mí, estará a salvo; entrará y saldrá y encontrará pasto. Una puerta abierta invita a entrar. Una puerta “cierra” y “abre” un local, una casa, un espacio, un templo. Una puerta separa y facilita la entrada. Una puerta abre un espacio en un duro muro y hace ese espacio tranparente y traspasable. Un puerta, es un espacio vacío y para poder llenarlo hay cruzarlo. Una puerta es una esperanza: entonces se me abrieron muchas puertas. Una puerta es un corazón. En ese caso esa puerta solo se abre por dentro. Una puerta tiene “el otro lado”, lo que está más allá de la puerta, si ésta está cerrada, el más allá es desconocido e inalcanzable, si está abierta es una invitación y un desafío a cruzarla y entrar, husmeando en lo desconocido. Una puerta es un mundo. Un mundo antes de entrar y un mundo, nuevo diferente, otro,.. dentro. Una puerta es un mundo nuevo. El maestro dice: Yo soy la puerta. Y Él es un Mundo, un Mundo Nuevo. Yo soy la puerta. Y Él es puerta abierta, desafío para cruzarla Yo soy la puerta; si uno entra por mí, estará a salvo. Y hay que entrar para conocer lo que hay dentro.

Yo soy la puerta de las ovejas. Y el Maestro lo aclara  yo soy la puerta en el redil de las ovejas. La puerta abierta es para reunir, proteger, acompañar y cuidar a su rebaño. La puerta no es decorativa, es para acoger y que su rebaño está seguro mientras el va a buscar a la perdida. Es puerta de una casa: donde hay familia, es puerta de una ciudad donde viven ciudadanos, es puerta de un estadio o de un teatro, o de un bar o de un… es puerta para entrar dónde viven y caminan hombres y mujeres de nuestro tiempo. Es puerta de nuestra sociedad y nuestro mundo. El Buen Pastor cruza  puertas en busca del hombre de hoy.

Y estamos  a la puerta. A la puerta del templo, de mi capilla, de mi comunidad, y parece que muchos tiene miedo entrar y otros muchos tienen miedo salir. Unos temen entrar prejuiciados por lo piensan que hay dentro: una iglesia, dura, exigente, recia en su acogida, empecatadora de todo el que se acerca, vieja en sus años e historia, una iglesia de beatos, de extraños, de bisoños y desequilibrados,… e inclinándose echa una ojeada, da un vistazo, y se va. Lo que vio desde la puerta lo dejo indiferente, le inquietó o hasta le ofendió. Lastimosamente,.. ¡No había nadie en la puerta  que lo acogiera¡ Otros temen salir. La puerta está abierta. Dentro haya un buen grupo, se supone que el Maestro, el que fue a buscar la oveja pedida dejando  las otros  noventa y buena en el redil, está con ellos. Pero,… con la puerta, visiblemente abierta, los que están dentro tienen miedo salir. Por miedo a que  los vean a la salida. Porque muchos les van a preguntar por qué entraron, porque los que hay fuera son muchos más a quienes no saben qué decirles  de lo que se hace allá dentro. Porque temen salir y hablar de los de dentro, de lo que viven, de lo que comparten, comparto, con Mi Buen Pastor. Porque no sé salir e ir a buscar a la perdida. Me da miedo pedirle prestado al Buen Pastor su bastón y su zurrón, salir y lanzarme  al campo, a la ciudad, desafiar las calles  e invitar a  quien me encuentre: ¡Entra¡ ¡ La puerta está abierta¡ ¡Entra¡ Y verás lo que hay más allá de la puerta. Puerta: abierta en algunas comunidades, entreabierta, con cierto recelo en otras y cerrada, en muchas otras, por temor a lobos, saltadores, mercenarios y pastores, como dice el papa Francisco, escaladores, incapaces de echarse  a los hombres ninguna oveja sangrante que manche mi etiqueta y temerosos de “oler a oveja”.

Domingo del Buen Pastor. Domingo de la Puerta Abierta. ¡Danos Señor pastores según tu modelo¡ ¡Enséñanos  a abrir y mantener las puertas abiertas para que todos puedan llegar a Ti, verdadera Puerta de nuestras comunidades¡  Así sea. Saludos.

           

         P. Esteban Merino Gómez, sdb.

No hay comentarios: