MINUTO DOMINICAL

“Hosanna: la alegría de la fe”

13 de Abril de 2014. Domingo de Ramos -  Ciclo A

  Evangelio de San Mateo 21, 1-11                                               

El Maestro, después de la resurrección de su amigo Lázaro, tenía la amenaza de sus enemigos y pensaban que no iría a Jerusalén a la fiesta de la Pascua. Aunque no era esperado Jesús entra, intencionadamente, de una forma sorprendente a la ciudad. Es el tiempo de  Pascua. Toda Jerusalén este abarrotada de gente, como nuestro domingo de ramos, más o menos. Y realiza un gesto profético que convulsiona la ciudad. Es Él mismo quien lo prepara como vemos en la tarea que da  a dos de  sus discípulos: Vayan al pueblecito que está al frente, y allí encontrarán una burra atada con su burrito al lado. Desátenla y tráiganmela. El gesto parece inocente y no lo hace porque esté cansado de caminar, sino para realizar un gesto profético que todos los que  le rodeaban entendieron. Vemos escenas semejantes en otros tiempos en Israel:   Salta, llena de gozo,  oh hija de Sión, lanza gritos de alegría,  hija de Jerusalén. Pues tu rey viene hacia ti; él es santo y victorioso, humilde, y va montado sobre un burro, sobre el hijo pequeño de una burra. (Zac  9,9)  El profeta Natán y Benaías, hijo de  Yoyada, hicieron montar a Salomón en la mula del rey David y lo  condujeron a Guijón escoltado por los quereteos y los peleteos.  El sacerdote Sadoc tomó el cuerno de aceite de la Tienda y  consagró a Salomón, al toque del cuerno, mientras todo el pueblo  exclamaba: "¡Viva el rey Salomón!" Luego subió todo el pueblo tras él; la gente tocaba la flauta y  daba muestras de una gran alegría; la tierra temblaba con el bullicio  que hacían. (1 Re 1, 38-40) Entonces,  sin esperar más, todos pusieron sus mantos sobre una tarima, y tocaron la trompeta diciendo: "¡Jehú es rey!"  (2 Re 9, 13) Esta entrada de Jesús en Jerusalén todos la entendieron: es el Rey de Vine.

          Y entre todos organizan una gran manifestación: Le trajeron la burra con su cría, le colocaron sus

mantos sobre el lomo y él se sentó encima extendían sus mantos en el camino, o  bien cortaban ramas de árboles, con las que cubrían el suelo. La alegría es desbordante. La multitud desata sus sentimientos y grita: "¡Hosanna al hijo de David!. ¡Hosanna¡: grito que significa originalmente “Salva” y que luego se convierte en una aclamación o alabanza. Todos son conscientes del gesto que hacen y a quien se lo están dedicando. La razón: "Mira que tu rey viene a ti con toda sencillez, montado en una burra, un animal de carga."  : "¡Hosanna al hijo de David!  ¡Bendito sea el que viene en el nombre del Señor! ¡Hosanna en lo  más alto de los cielos!" : "¡Este es el profeta Jesús, de Nazaret de Galilea!"

          El Maestro produce una irrupción de esperanza y de fe. Entusiasma y conquista. Hace gritar y cantar. Los Hosanna surgen espontáneos mientras los ramos se agitan. Es el entusiasmo de los discípulos, de los ciudadanos, de los transeúntes. Con el papa Benedicto y el papa Francisco podríamos decir: es la alegría de la Fe. “La tarea del pastor, del pescador de hombres, puede parecer a veces gravosa. Pero es gozosa y grande, porque en definitiva es un servicio a la alegría, a la alegría de Dios que quiere hacer su entrada en el mundo”.  Quien ha descubierto a Cristo, debe llevar a otros hacia Él. Una gran alegría no se puede guardar para uno mismo. “Descubrir la belleza y la alegría de la fe es un camino que cada nueva generación debe recorrer por sí misma, porque en la fe está en juego todo lo que tenemos de más nuestro y de más íntimo, nuestro corazón, nuestra inteligencia, nuestra libertad y nuestra relación profunda y personal con el Señor”. El Domingo de Ramos es el Domingo de la Alegría de la Fe. De la alegría de ser Cristianos. La alegría que contagia, que se hace Hosanna, en la felicidad, en el cansancio, en la Pascua de Dolor, en la resurrección. HOSANNA: ES LA ALEGRÍA DE MI FE. ¡Buena Semana Santa con el Maestro en la alegría de la Fe. Saludos.

         P. Esteban Merino Gómez, sdb.